País de cobardes

Después de muchos meses de silencio vuelvo al blog para decir que somos es un país de cobardes. La Democracia no llegó gracias al PSOE ni a la derecha ahora representada por el PP, ni por Suarez. Llegó porque hubo quien se jugó el tipo y pasó muchos años en la cárcel por mantener encendida la llama de la libertad, uno de cuyos exponentes fue Marcelino Camacho. Mientras tanto los demás dormitaban bajo los “25 años de Paz”.

Ahora nos afanamos por mantener en el poder a impresentables como Zapatero o Rajoy y su corte de lameculos sin otra ideología que mantenerse en el poder cueste lo que cueste, aunque el precio sea el país entero o lo que han dejado de él estos mercaderes de la mentira.

¿Queremos ser libres o seguiremos creyendo que la libertad es elegir si queremos ir uncidos a la derecha o a la izquierda del yugo? ¿Queremos cambiar de amo o solamente de látigo?

Las conquistas sociales que se ganaron con siglos de cárcel por los sindicalistas de CCOO las hemos perdido porque sus herederos junto con los advenedizos de UGT y la traición de presuntos “izquierdistas” como Felipe González y Zapatero se han atrevido con logros que la derecha nunca se hubiera atrevido a tocar.

Seguid eligiendo vuestro puesto a derecha o la izquierda del yugo y seguid tirando del carro de los millonarios de Forbes. Otros probaremos fortuna aunque sea con el Partido Pirata, el de la Marihuana o con opciones menos arriesgadas como UPyD.

La única esperanza está en echar a la chusma que se conforma con ir de lacayos en el carro, recogiendo las migajas de las corruptelas que les proporcionan y lastran pesadamente el carro desde el que tiramos todos. Nosotros como unos estúpidos solamente vemos la mitad que nos interesa de un todo corrupto en el que los corruptores son los mismos, pero los corruptos cambian cada cuatro o cada ocho años y eso es lo que les interesa ¿O acaso creeis que quieren poder para mejorar nuestras vidas? cuanto más cerca del poder mayores oportunidades de corromperse mientras los gilipollas que pagamos y elegimos somos cada vez más pobres.