lunes, 24 de noviembre de 2008

El cortijo del Gobierno

La política hidráulica del gobierno de Zapatero respecto a la gestión de las cuencas hidrográficas, me recuerda cada día más a los viejos hacendados que en lugar de gestionar bien su patrimonio y tratar de obtener el mayor rendimiento posible, dedica su tiempo a ejercer de rico, despreocupándose de ello y dejando que los encargados de sus cortijos organicen monterías a sus espaldas, vendan las bellotas y hasta talen las encinas para su lucro personal.

Así, cuando al señorito se le acaba el dinero, vende una parcela, un huerto o hasta el cortijo entero para seguir viviendo sin problemas, haciéndose pasa por lo que cada día es menos, hasta que se queda sin nada que vender y -además- con abultadas deudas.

Normalmente, esto sucede cuando ya son viejos, por lo que su legado son deudas y problemas que tendrán que resolver sus sucesores, haciéndose cargo de los despojos de lo que fue un patrimonio admirado por todos.

El problema es que los ciudadanos no podemos renunciar a la herencia que nos legará el Gobierno en forma de un estado roto, vacío de competencias, sin autoridad moral y con unos encargados/guardas mayores de cada cortijo tan crecidos que se han hecho dueños de ellos y sólo les faltan las escrituras a su nombre.

Hemos sido pioneros en la gestión del agua por cuencas y el espejo donde se mira el mundo en este aspecto, pero una gestión descerebrada y orientada al “Pan para hoy y hambre para mañana” nos ha llevado a dilapidar un legado que será casi imposible recomponer, y de seguir en esta línea, los enfrentamientos entre comunidades, y aún con otros países como Portugal serán de suma gravedad.

Dar la gestión de las cuencas a las autonomías es cambiar al perro por el lobo para ciudar el rebaño.

2 comentarios:

Oroel dijo...

Por favor, Llanero, ya sé que cada uno es sueño de su blog, pero cambia su aspecto. Fondo claro y letras oscuras. Me estoy volviendo mayor y tengo dificultades en leerlo. Y es una pena, porque me gusta

Oroel dijo...

Ejem: dueño...