miércoles, 23 de diciembre de 2009

Empresarios

Diaz Ferrán es el mejor ejemplo para ilustrar lo que pasa en España. Tenemos un gobierno que sólo se ocupa de maquillar su gestión con gilipolleces mientras la realidad se aleja cada día más, y una derecha empeñada en culpar de la crisis a un gobierno que ojala la hubiera provocado, pero de tan incompetente ni siquiera llega a eso. Simplemente no ha hecho nada.

Recordemos a los que se empeñan en culpar de todo a Zapatero, que precisamente el principal actor de la crisis es el paro, que quien despide son las empresas y que quien autoriza (a menudo con demasiada ligereza) los despidos suelen ser las autonomías a través de las consejerías correspondientes.
El señor Ferrán (simpatizante confeso del PP) es el representante de una patronal que ni le desautorizó cuando hizo aquellos comentarios contra el gobierno (problema de la economía no era "la grave crisis, sino los años de Zapatero" en el Gobierno) o dijo que Esperancita “es cojonuda, cojonuda”, ni le pidió la dimisión cuando el escándalo de Air Comet era evidente, ni cuando sabían que los trabajadores llevaban sin cobrar desde julio.

La clave de la crisis no es Zapatero, sino unos empresarios que sólo saben vivir del cuento y de los pelotazos, que ganan dinero cuando las vacas gordas y hacen que lo pierdan los trabajadores cuando adelgazan.

Juntemos un gobierno inoperante, una oposición tan inútil como el gobierno y que se regodea en la crisis y el paro que provocan sus propios simpatizantes y una patronal cobarde, retrógrada y desvergonzada que se atreve a mantener de presidente a un empresario que no paga a sus trabajadores, algo que es lo fundamental de un empresario y sin lo cual pasa a ser un simple delincuente. Hay clases eso sí; por vender cedes piratas te llevan a la cárcel, pero por no pagar seis nóminas a tus empleados, quebrar la empresa y dejar a siete mil personas sin navidades después de haber cobrado.

Ya vemos que la ley es igual para todos.

2 comentarios:

celebrador dijo...

La imagen pública de la patronal que comentas ha quedado muy maltrecha con esto

No obstante, el "empresario-tipo" no se puede definir por esos términos (sospecho yo)

Abrazotes

LLanero dijo...

Por supuesto que afortunadamente el empresario tipo no este, ni siquiera los agrupados en la CEOE.

Si este país no se ha ido ya al carajo es porque hay empresarios que trabajan 20 horas diarias, que no tienen libres todos los fines de semana y que normalmente no han pedido una subvención en su vida.

Lamentablemente, los empresarios que más suenan son tipos como éste, los Albertos, o Mario Conde. Empresarios sin empresas (que bonito nombre para una ONG) que viven del pelotazo y del dinero fácil.